Monos amenazados
Entre las especies de animales amenazados del mundo, figuran muchos monos de América, Asia y África. De acuerdo con la lista de 2012-2014 de las 25 especies de primates más amenazadas, 15 de ellas son monos (incluido un gibón, animal a veces llamado mono pero que en realidad es un simio inferior) y el resto son otros primates. Estas especies se encuentran en las categorías En peligro crítico y En Peligro de Extinción, sus poblaciones están disminuyendo drásticamente y su supervivencia a largo plazo es incierta.
De acuerdo con la lista de 2012-2014 de las 25 especies de primates más amenazadas, 15 de ellas son monos.
De todos ellos, el langur cola de cerdo (Simias concolor), el langur de Delacour (Trachypithecus delacouri), el langur de cabeza blanca (Trachypithecus poliocephalus), el langur de la especie Trachypithecus vetulus nestor, el douc de patas grises (Pygathrix cinerea), el langur de nariz chata de Tonkin (Rhinopithecus avunculus), el gibón de cresta negra oriental (Nomascus nasutus), el mono araña de la especie Ateles hybridus, el mono araña de cabeza marrón (Ateles fusciceps fusciceps), el mono capuchino Kaapori (Cebus kaapori), el tití del río Mayo (Callicebus oenanthe) y el carayá colorado norteño (Alouatta guariba guariba) están en peligro crítico de extinción, mientras que el colobo rojo del río Tana (Piliocolobus rufomitratus), el cercopiteco de Roloway (Cercopithecus roloway) y el colobo de Pennant (Procolobus pennantii pennantii) aparecen como En peligro de extinción.
Como muchos otros animales, los monos han visto cómo sus hábitats naturales se han afectado debido a muchas actividades de los seres humanos, y cómo estos terminan directamente con sus vidas. Los monos mencionados no son los únicos que enfrentan serios peligros. Otros, como el mono narigudo (Nasalis larvatus), el mono araña negro (Ateles paniscus) y el langur chato dorado (Rhinopithecus roxellana) se hallan en peligro de extinción.
¿Cuáles son las mayores amenazas de los monos?
Destrucción de hábitat, debido a:
-Tala ilegal e inmoderada que lleva a la deforestación.
-Conversión de terrenos naturales en zonas para la agricultura, la minería y el pastoreo.
-Desarrollo urbano. Las ciudades crecen, se construyen nuevos edificios o estructuras destinadas a satisfacer necesidades de las poblaciones y los territorios de los monos son invadidos o destruidos.
-Fragmentación de hábitat. Como resultado de la tala, la urbanización o cualquier actividad que implica la modificación del hábitat, algunas zonas quedan aisladas entre sí, por lo que los monos pueden separarse.
› La destrucción del hábitat y la caza son las mayores amenazas de los monos.
–Caza. Los monos son cazados para obtener su carne, como respuesta tras haberse alimentado de los cultivos humanos, para usar partes de su cuerpo en la medicina tradicional, para venderlos como mascotas exóticas, etcétera. En algunos países se destina su carne al consumo humano.
Por la protección de los monos del mundo
Los primates son animales carismáticos e interesantes, y tienen varias similitudes con los seres humanos. Algunos monos son capaces de utilizar herramientas, y la mayoría de las especies está organizada en una estructura social compleja. Sumado a esto, su valor en el medio natural, como parte de los ecosistemas y de las cadenas alimentarias, los convierten en animales clave para la salud de la naturaleza. Por ejemplo, varios monos araña fungen como dispersores de semillas: al consumir frutas devuelven las semillas casi íntegras al suelo, tras lo cual cabe la posibilidad de que germinen nuevas plantas.
Los esfuerzos de conservación están encaminados a proteger las especies, a preservar su bienestar y a permitir que continúen en la Tierra durante mucho tiempo más. Organizaciones internacionales han dedicado tiempo y recursos para apoyar la creación y el mantenimiento de áreas naturales protegidas en las que los monos vivan; esto es porque su supervivencia depende en gran parte de la existencia de sus hábitats. Además, países que albergan especies han prohibido la caza de monos en sus territorios y han creado reservas en donde su captura está negada.
A pesar de las estrategias nacionales e internacionales, los números siguen reduciéndose. La clave para la protección está en involucrar a todas las personas, que estas conozcan los riesgos de perder a las especies y que al final se concienticen para lograr una participación más activa en los esfuerzos de conservación de su localidad. ¿Puede contarse contigo?